Movilidad a Adana (Turquía)  24-28 octubre 2022

Todas las movilidades son especiales, te nutres de otras culturas, sistemas educativos diferentes, de otras formas de pensar... pero esta movilidad a Turquía es muy especial para nuestro centro y para el equipo Erasmus: primero, porque es la primera movilidad que hicimos después de la Pandemia y segundo porque no ha sido fácil. Elegimos Turquía porque teníamos un proyecto con un centro de Adana sobre igualdad; hace años, el centro educativo  denominado Yil Anadolu Lisessi presentó un proyecto KA229 sobre igualdad donde nosotros participábamos como socios; desgraciadamente, no fue concedido, probablemente por la cantidad de proyectos que este país presenta año tras año. Sin embargo, seguimos manteniendo contacto con su coordinadora Burçak porque nos interesaba mucho el tema y trabajamos bidireccionalmente en la importancia de la mujer en ambos países así como en los cambios que ambas sociedades han sufrido en estos años para que la igualdad efectiva entre hombre y mujer sea una realidad, sin cejar en nuestro empeño de luchar por la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres como una estrategia clave del desarrollo: «el empoderamiento de las mujeres y su plena participación en condiciones de igualdad en todas las esferas de la sociedad, incluida la participación en los procesos de toma de decisión y el acceso al poder, son fundamentales para alcanzar la igualdad, el desarrollo y la paz» (declaración de Pekín, 1995). Todo este trabajo culminó en esta visita. Ellos tenían un KA122 con otros cinco países ( Rumanía, Portugal, Bulgaria, Croacia e Italia) y nos invitaron a participar de su movilidad. No lo pensamos dos veces: !!!7 países discutiendo sobre igualdad de género!!!!! Es por ello que hicimos lo posible  e imposible para que esta movilidad saliera a flote, a pesar de las reticencias de algunas familias, alumnos y profes.

Siempre que hacemos una movilidad, nos reunimos con las familias y los estudiantes para explicarles el planning, los documentos que tienen que preparar, tips para la maleta, etc. Colgamos aquí el documento que utilizamos para la reunión, para que os hagáis una idea del detalle con el que mimamos todas las movilidades. 

 

 

Lo primero que os llamará la atención es que no termina el 28 de octubre, sino el 31. La razón es simple, no había vuelos directos Adana-Madrid, teníamos que hacer escala en Estambul y nos parecía una pena que nuestros estudiantes no pudieran conocer esa amalgama de culturas que es Estambul, por lo que decidimos pasar dos días en la ciudad dividida por el  estrecho del Bósforo para poder visitar sus monumentos más importantes y pudieran ver en primera persona si la igualdad de género existe en esta ciudad, cuna e inmensa amalgama de culturas, de historia y de religiones. Pero antes, Adana

El lunes 24 comenzó nuestra movilidad con una excursion por la ciudad. Burçak nos enseñó la ciudad y su maravillosaMezquita central Sabanci, Puente de piedra, Museo del cine, la Torre del gran reloj y su antigua universidad, el Museo arqueológico,  y el Boulevard Menderes. Fue una  primera toma de contacto entre los estudiantes y profesores. Comimos y cenamos todos juntos, aunque he de decir que cada país en una mesa, lo que no induce a las relaciones sociales ni a compartir experiencias, ideas o buenas prácticas. 

 

 

El martes conocimos La Capadocia donde visitamos la ciudad subterránea de Çardak, el Valle de Pigeon,el castillo de Uçhisar y un taller de cerámica. Después de comer, los autobuses nos llevaron a las Chimeneas de las hadas, las Tres gracias y bodegas de Ürgüp. A nosotros nos importaba que nuestros alumnos se relacionaran con el resto de estudiantes porque entendemos que el programa Erasmus nos da esta oportunidad de no solo ampliar los horizontes de nuestro alumnado sino de abrir sus mentes y formas de pensar, de quitarse esas etiquetas y ser ellos mismos con gente de su edad donde, siempre en un contexto educativo, puedan expresarse e intercambiar ideas. Este era nuestro principal objetivo y a pesar de que el grupo era heterogéneo, era tarea harto difícil que los estudiantes socializaran entre ellos. Los italianos y los españoles, con caracteres similares, fueron los primeros en socializar.

 

 

Miércoles: visita a Antioquía y su increíble museo arqueológico. Las relaciones ya se iban estrechando con los estudiantes turcos!!

 

Y por fin llegó el día en el que fuimos al centro educativo y nuestros alumnos presentaron sus trabajos sobre igualdad. Recibimos una cálida bienvenida por parte del director y equipo directivo y de los alumnos que allí estudian. Nos agasajaron con alimentos preparados por ellos mismos y pudimos disfrutar de una jornada de talleres  de caligrafía, juegos autóctonos, pintura, etc mientras los derviches bailaban sus bailes típicos turcos. Por la noche, nos agasajaron con una cena de despedida con baile incluido donde los estudiantes, conocedores de que era su última oportunidad de relacionarse entre ellos, decidieron dejar su pudor y timidez a un lado y disfrutar. 

 

Al día siguiente volamos a Estambul, ciudad con una impronta histórica que la erige como cuna de civilizaciones, que atrapa a los sentidos por sus paisajes y sus aromas a especias y café, pero sobre todo por esa particularidad de ser la ciudad de los dos continentes. ¿Qué decir de igualdad? queda mucho camino por recorrer pero avanzan a grandes pasos, como nuestros alumnos: el hecho de vivir en una zona rural geográficamente muy dispersa limita sus habilidades sociales afectando a su desarrollo personal y a su capacidad para aceptar la diferencia. Esta movilidad les ha enseñado que deben dejar su pusilanimidad a un lado. Son ciudadanos europeos. Las diferencias nos enriquecen y el respeto a la diversidad nos une.